viernes, 15 de abril de 2016

Capítulo 21

Cuando en 1971 Stanley Kubrick rodó "La Naranja Mecánica" (A Clockwork Orange en el original), aquella película tan perturbadora, nuestro director fetiche por desconocimiento y porque rompía con el resto de la obra, esa violencia latente; decide retirar del libreto el último capítulo de la tercera y última parte de la obra.

Estrujándonos el rasudoque descubrimos que la intencionalidad del autor distaba de la del director; es decir el último capítulo, el 21, es una bajada al purgatorio, un ápice de salvación, en definitiva un arrepentimiento sincero del protagonista Alex. Resulta que Ourang en malasio significa persona y no es casualidad que el mismo autor, que había vivido en malasia, haga un juego de palabras entre "orange" naranja y "ourang" persona. Ergo el título real es "El hombre mecánico" y la idea esencial sobre la libertad humana. El mismo Burgess explicaba lo siguiente:

«... por definición, el ser humano está dotado de libre albedrío, y puede elegir entre el bien y el mal. Si sólo puede actuar bien o sólo puede actuar mal, no será más que una naranja mecánica, lo que quiere decir que en apariencia será un hermoso organismo con color y zumo, pero de hecho no será más que un juguete mecánico al que Dios o el Diablo (o el Todopoderoso Estado, que ya está sustituyendo a los dos) le darán cuerda».

y el mismo Alex lo explica al final:


"Eso es lo que va a pasar ahora, hermanos, ahora que llego al final de este cuento. Habéis acompañado a vuestro druguito Alex allá donde ha ido, habéis sufrido con él y habéis videado algunas de las acciones más brachnas y grasñas del viejo Bogo, todas sobre vuestro viejo drugo Alex. Y todo se explicaba porque era joven. Pero ahora, al final de esta historia, ya no soy joven, ya no. Alex ha crecido, oh sí."

Aunque lógicamente recomiendo leer la novela entera

Malcom Macdowell dando vida a Alex en el film 

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